Nietzsche contra Wagner

Publicado el 15/02/2011

He aquí un artículo interesante sobre esta bifurcación de vidas que ocurrió entre el músico y artista total y el filósofo radical como ninguno. Es interesante digo, y recomiendo su lectura, pero me limito ahora a ofrecer unos breves extractos relacionados con el filósofo.

Zaratustra pasa por camello,león y niño. Y confiesa:

El león, entonces, simboliza un 'NO sagrado' que rompe las cadenas del discípulo hacia el maestro, el acto esencial para la 'creación de la libertad para uno mismo'

Valga esto para la discusión entre Teo y yo. Tampoco la siguiente cita es ajena a esa breve polémica:

Nietszche ve en la Tragedia a Dionísio, no a Apolo, ve lo trágico como algo “gozosísimo, exuberante, arrogantísimo dicho a la vida, no es sólo la intelección suprema, sino también la más honda... No hay que sustraer nada de lo que existe, nada es superfluo... Para captar esto se necesita valor y, como condición de él, un exceso de fuerza: pues nos acercamos a la verdad exactamente en la medida en que al valor le es lícito osar ir hacia adelante, exactamente en la medida de la fuerza...”

El exceso de fuerza me recuerda a la plaza de la liberación de El Cairo que nada tiene que ver con el hieratismo de un Apolo. Ni tampoco con la figura, casi cristiana en su resignación, de Tristán cuyo rechazo es la esencia de la ruptura entre el maestro y el discípulo leal que se ve obligado a romper para no traicionarse.

Como vemos no es ‘Parsifal’ el ejemplo que pone, porque no es el cristianismo de Parsifal lo que más molestaba a Nietzsche, contra lo que se ha dicho muchas veces. El problema que los separaba era el ‘amor a la vida’, el sentido disonisiaco de la vida, el placer y la lucha por vivir a tope, luchar y vencer, matar y excitar la existencia. En Parsifal hay aun una victoria, una regeneración, un triunfo del ‘bien’ que supone una voluntad de vivir. Es ‘Tristan’ para Nietzsche el ejemplo de la filosofía de Schopenhauer, la negación de vivir, el cansancio ante la vida. Amor para morir, amor en la Noche, fuera del mundo. La vida solo está allí donde acaba el Día, o sea la vida. Esta era la esencia del problema con Wagner/Schopenhauer.

Es el entusiasmo lo que tenemos que buscar, no la resignación. y cuando flaquea nuestro espíritu dionisíaco, tenemos que buscarlo en donde se encuentre. Por ejemplo en la reacción de las mujeres contra Berlusconi.