El color es una pista

Publicado el 10/08/2010

Azul y negro. Unos colores que recuerdan a los falangistas en traje de campaña. Son los colores del bañador 5, el que recibí el otro día a través de Correos. No, no me confundí, no era una mensajero cualquiera; la rubia era una funcionaria de Correos, aunque ahora que revivo el momento no estoy seguro de que su moto sea de las usadas por esa Empresa pública. Bueno es una pista, pero ahora no puedo seguirla pues, aunque conozco a su Presidente, no es época para molestarle en su retiro veraniego.

Pero no puedo abandonar a la rubia a lo Marlene Dietrich. Si pudiera encontrarla.... He pedido a mis amigos de las Indias que me manden un sobre mullido con un contenido irrelevante por medio de Correos a ver si la entrega es parecida. Como están esparcidos por el mundo es posible que el sobre pueda no provenir de Madrid aunque, si soy capaz de discernir de dónde viene, sabré que el paquetito con el bañador era un cebo pues no pude distinguir desde dónde había sido remitido.

Pero tardarán en hacerlo de forma que me encuetro encerrado sin saber qúé hacer.

Aunque me da miedo salir de casa, no vaya a pasar lo de ayer, no he podido refrenar mi ansiedad y he decidido ir a la playa a la búsqueda de rubias marlenes.

Sin embargo dudo sobre el bañador a usar en el paseo que tendré que darme por esa larguísima playa mediterránea. Si el 5, ellos sabrán que les estoy buscando o, al menos, lo intuirán. Mejor llevo el 6, el único con menos de 20 años y que es como de lujo. Es de color grisáceo y el dibujo recuerda un juego de Tetris una vez conseguido terminarlo. Pareceré un viejo verde andaluz y así podré observar sin levantar sospechas.

¿Pero qué busco? Una rubia con un bañador de nadadora olímpica con unos colores como los del bañador 5 o quizás una rubia leyendo tranquilamente Expansión. Sigue teniendo un color salmón, pero solo en su edición en papel. En la versión digital acaba de cambiar los colores y ahora son exactamente los mismos que mi bañador 5.

Bueno, allá voy.