Juan Urrutia Elejalde

Graneles

Textos de Juan Urrutia desde 2002

Cabecera del sitio
Dos inconsistencias simétricas

Dos inconsistencias simétricas

Aunque no lo hago todos los domingos ayer compré el ABC y me encontré con una bonita columna de Jon Juaristi con su prosa cada día más limpia y brillante. Se titulaba Fugas y se refería, claro está, al incidente entre Esperanza Aguirre y los agentes de movilidad que tanto ha conmocionado a los oteadores del estado de la opinión pública. Juaristi no conduce y nos deleita con las ventajas de esa condicón que, solo hace unos años, revelaba una personalidad un si es no es autista pero que hoy parece que comienza a generalizarse entre cierta juventud que prefiere el transporte público y odia trabajar en la banca (detalle este último quea nada tiene que ver con el contenido de este comentario pero que no quiero omitir porque agunos lo toman también, junto con la ignorancia automovilística, como un signo de un interesante cambio en el espíritu de los tiempos).

Otro ejercicio literario, 3. El concierto de los domingos

Otro ejercicio literario, 3. El concierto de los domingos

No creo que tuviera lugar todas las semanas. Me refiero al concierto de la Sinfónica. No lo creo porque, de haber ocurrido todos los domingos, no recordaría dichos días con más fruición que la musical, y no lo mezclaría con la innombrable de la misa de 12 de San Vicente.

LXXVIII, Filantropía científica

LXXVIII, Filantropía científica

El suplemento New York Times del periódico El País correspondiente al 27 de marzo contenía un artículo largo con el título « Los ricos se adueñan de la ciencia ». Hay que estar suscrito a Kiosko para leerlo on line pero eso no es óbice para reflexionar un poco sobre un título tan llamativo y sobre su contenido relacionándolo con otros posts antiguos y con ideas de hace ya bastantes años. La excesiva contundencia del título queda un poco atemperada por el subtítulo: «Los magnates financian proyectos ante el recelo de los escépticos».

Estado... ni el vasco

Estado... ni el vasco

Se van poniendo nerviosos los partidos con las elecciones europeas e inician el funcionamiento de su maquinaria electoral. Hoy, como estoy en Bilbao, leo una ración extra de noticias de mi comunidad y me llama la atención las declaraciones del presidente del PNV, más allá de su caricaturización de Bildu, de que Europa se debía mirar en Euskadi y de que tanto Francia como España deberían abrir su mente al derecho a decidir de los vascos. Por otro lado el mismo Ortuzar u otro político declara algo relacionado con lo vieja que se queda la noción de estado-nación.

Otro ejercicio literario, 2. Exilios

Otro ejercicio literario, 2. Exilios

Solo la noche le calmaría el terror, porque quien le abrazara sería de los suyos. «¿ Qué sentido tendría que fuera al revés ?» grité como para acelerar el final de mi razonamiento y dejarle tiempo a ella para decir algo suave, inteligente y excitante de lo que, como un tren eléctrico entrevisto por un niño en un escaparate, yo ya no pudiera prescindir. Quería que me hablara, que me tocara, que bailara un vals sincopado y es que no tenía otra manera de pedírselo que hablar de lo mío siempre de forma que le quedara un resquicio para mostrar que aunque solo escuchaba a medias, eso le bastaba para desmontar mi argumento pero que nunca ella abriría el cajón de sus sensaciones.

Sloane sq.,  las trampas de la memoria o los límites de la wikipedia

Sloane sq., las trampas de la memoria o los límites de la wikipedia

El Roto nos pregunta hoy en su viñeta diaria, en referencia indirecta a la muerte de Adolfo Suarez, si no se tratará de necrofilia y no de admiración. Es un asunto de nuestra memoria y la del presidente, y eso me ha traído a la cabeza la disyuntiva del título. La memoria, en efecto, nos juega trampas que wikipedia no puede remediar.

Otro ejercicio literario, 1. Fronteras

Otro ejercicio literario, 1. Fronteras

Mi topografía sentimental iba a ser destruída a lo largo del otoño por los comentarios precisos que como puñales de acero bien templado fue ella intercalando en mi candoroso discurso a lo largo de un paseo que se hizo regular y tomó poco a poco su forma y sus contornos propios. Más adelante, durante la primavera, nuestra cercanía serena se vería enturbiada, pero hasta que la alegría irreprimible y la arbitrariedad irreductible de X llegó a nuestras vidas, la rutina de nuestros contactos me hacía rebosar de complacencia. Como yo vivía beim Frau Schultz aguas abajo del Salzach muy cerca del Neue Brüke y ella aguas arriba a medio camino entre el Schloss y Helbrum, nuestra cita diaria de las cinco de la tarde ocurría precisamente al borde este del recinto universitario donde yo había pasado toda la mañana de ocho a una y el que volvía a atravesar, viviendo desde el oeste y a donde ella llegaba desde el este saliendo por primera vez en el día de su mansión en la que, como en una finishing school , ella y sus dos compañeros eran mimados por un elenco profesoral de campanillas que visitaba Salzburg, y vivía in house , precisamente para ofrecer a estos tres seres privilegiados, esperanza mundial de una generación generosamente becada en sus países de origen, todo el saber musical acumulado en Mittel Europa en los tres últimos siglos.

Lo difícil es el título, ¿Inversión Temporal?

Lo difícil es el título, ¿Inversión Temporal?

Los posts surgen en mi cabeza en algún momento de los paseos que, como infartado, debo realizar cada día. En la media hora que ando desde casa a la oficina y en la otra media hora de vuelta, me basta con escucharme el ruidito del cerebro, reconocer su origen y comenzar a elucubrar. En dos o tres días estoy preparado para escribirlo; pero lo difícil es el título, difícil y crucial, pues el éxito de un post de escasas mil palabras depende del tirón de esas primeras que conforman el título.

Como si siguiera en Londres

Como si siguiera en Londres

Estar cerca de un acuchillamiento o del derribo de un edificio, acontecimientos estos a los que me refería en el último post, no es lo único que hace de Londres una ciudad interesante. De mis últimas visitas hace ya demasiados años recuerdo bien el mestizaje que se mueve por el centro, por los parques o por la City, algo que ya se ve también por aquí, pero no con la intensidad con la que se da en Londres. Se cuenta que la estrategia del Reino Unido en materia de inmigración consiste, a diferencia de la que priva en Alemania, en agregar a diferentes grupos étnicos en ghetos bien separados.

Back home

Back home

Ayer volvimos a casa después de unos días en Londres con PO y JO completamente alejados de smart phones, tabletas o lap tops, tal como ya lo avisé en la postdata del último post, y completamente dedicados al arte y al teatro y a... Una buena despedida de estas minivacaciones parecía la visita a un restaurante misterioso de comida del Middle East en Islington, el Ottolenghi Está tan de moda (en ciertos ambientes claro) este restaurante del chef israelí Yottam Ottolenghi que nos retrasaron la hora de una reserva hecha con casi dos semanas de antelación de modo que tomamos nuestro taxi con bastante antelación, pero aun así, llegamos tarde pues, según nos descubrió la taxista negra, había un autobús parado que no dejaba circular debido a que se acababa de cometer un crimen con arma cortante dentro de él. Finalmente, y con un desprecio total de este incidente, llegamos a la cita culinaria, pero nuestro retraso nos obligó a renunciar a la mesa para cuatro y a aceptar cuatro sitios en una mesa corrida para irritación de JO que solo recobró la sonrisa después de elegir el vino.

Mi negra en el linóleo, un ejercicio literario

Mi negra en el linóleo, un ejercicio literario

Son ya tantos días en este encierro mediador entre un infierno y otro que empiezo a hacerme a la idea de hacer de este espacio oscuro y húmedo un hábitat en el que desarrollar las aptitudes y manías que no me pude permitir en la vida aparentemente ordenada que había llevado hasta que ocurrió lo que tenía que ocurrir o lo que quise que ocurriera. Esa es una de las cosas sobre las que tendría que reflexionar en lo que me quede de vida consciente a este lado del océano al que pienso que voy llegando. A pesar de que el container tiene una especie de ventanucos por donde se renueva el aire y que resuenan vibrantes en cuanto el viento arrecia un poco, no tengo forma de distinguir el paso de los días incluso si con la ayuda de la linterna que me prestó Aitor puedo saber que hora es, pero no en que día estoy.

Independencia corporal

Independencia corporal

En los últimos años se habla mucho de independencia, de la de Quebec, de la de Escocia, de la de Euskadi o de la de Cataluña y el problema de fondo florece de nuevo con la crisis ucraniana o, si queremos, la de Crimea. Hablando de esta última D. volvía implícitamente su atención, una vez más, a las posibilidades de la Confederación como una forma política que algunos opinamos que tiene un enorme futuro precisamente en un mundo globalizado pues permite transar entre las aparentes ventajas (autoritarias) de un gobierno central único y la eficiencia en la provisión de bienes públicos locales, incluyendo las lenguas.

Hospitales , pijamas y un camisón

Hospitales , pijamas y un camisón

Hace unos días acompañé a mi hijo Rafael a una intervención no muy seria pero que requería un postoperatorio de un par de noches. Desde aquella primera intervención en la que me extirparon la vesícula biliar, mi olfato, mi vista y mi oído no dejan de percibir ciertas connotaciones indescifrables en cuanto entro en una clínica, un hospital o un sanatorio, sean estas instituciones públicas o privadas. Pero estos últimos días he comenzado a descifrar el enigma a través de unas conexiones realmente surrealistas.

¡Vivir sin agenda!

¡Vivir sin agenda!

« ¿Qué tenemos hoy Esperanza? » Esta podría haber sido la primera pregunta mañanera de cada día si hubiera tenido alguna vez una secretaria que respondiera a ese nombre y que me hubiera llevado la agenda total y no solo la correspondiente al trabajo de modo que en ese primer momento de la mañana sabría si esa conferencia comprometida toca hoy o si he quedado a comer con mi mujer. No imagino una secretaria tan total pues no solo tendría que haberme dicho que hoy toca la conferencia sino también hubiera debido informarme hace días que necesitaba dedicar un número determinado de horas a preparara esa conferencia a partir de la lectura de la documentación correspondiente cuya búsqueda también tendría que haber constado en la agenda.

Zizek «humanity»

Zizek «humanity»

Hace ya mucho tiempo tomé unas notas a partir de un libro de Zizek, ahora no recuerdo cual. Las notas están en inglés así que debe ser un libro reciente que a la sazón no estaba traducido. Tampoco soy muy capaz de reconstruir una determinada unidad a las notas aunque no creo estar muy descaminado si pienso que cuando las tomé debía estar con la cabeza en algo sobre lo que significa la humanidad como algo opuesto a la inhumanidad.

LXXVII, Transgredir

LXXVII, Transgredir

Me escribe una amiga querida para decirme que, a pesar de mis consejos, no encuentra posibilidades de transgredir. Se lo aconsejaba como una de las maneras de no envejecer una vez el tiempo te ha liberado de las obligaciones profesionales y no sabes muy bien cómo y por donde comenzar una nueva vida. Esto que le pasa a mi amiga me pasó a mí después de aquellos primeros años en los que me empeñé en cometer una ilegalidad al día tal como conté en Faroladas.