Juan Urrutia Elejalde

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Textos de Juan Urrutia desde 2002

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Conversemos sin enlaces

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Los comentarios al último post («El poder de las palabras») han configurado lo que podríamos entender como el comienzo de una verdadera conversación en la que el poder no es asimétrico y en la que las palabras no se usan como armas. Dejando aparte la aclaración sobre Chutzpah (que, dicho sea de paso, tampoco está mal en ocasiones como estrategia para tratar de comenzar una conversación de verdad, cuando se tiene delante a alguien dispuesto a sopesar los distintos poderes y no a dejarlos de lado); merece la pena recordar la segunda parte de lo que dice Juanmi cuando pone en duda que la política pueda albergar la parresia: > Que no se me malinterprete como el típico comentario victimista y vengativo de la AVT y similares organizaciones pro-terrorismo de Estado. De hecho me parece injusta y desacertada la doctrina Parot (que actúa bajo otros intereses políticos), y, aún con todo, pienso que lo acertado es lo que hace este señor (entendiendo su posición): dar un discurso pacífico y sosegado para avanzar en el proceso de paz.

LXXI, El poder de las palabras

LXXI, El poder de las palabras

Las palabras importan e importan mucho. Siempre me ha llamado la atención la exigencia de que se diga «I love you» aunque quizá debiera ser obvio que ese es el caso. Y la declaración del cese definitivo de la violencia por parte de ETA ha revivido esa importancia referida a palabras como por ejemplo «terrorismo» en ámbitos relacionados con el País Vasco (¿Euskadi?

Bernhard y Ferreira

Bernhard y Ferreira

Recientemente he leído dos libros que recomiendo y que, curiosamente, me han redordado el uno al otro. El primero es Tala, de Thomas Bernhard, un autor éste que me dejó pasmado hace ya muchos años y del que no había vuelto a leer nada hasta la lectura de este libro ya antiguo dentro de su bibliografía. Son unas doscientas páginas sin un punto y a parte llenas de improperios a sus viejos amigos, improperios que se corresponden con lo que el piensa un día triste sentado en un sillón de orejas esperando a que una cena tardía, a la que no debería haber acudido, comience de una vez.

La grande bellezza

La grande bellezza

El nihilismo, entre el costumbrismo imaginativo y el difícil trance de reconocimiento de la esterilidad estética, trufado por un guión lleno de frases citables más allá de las menciones de o a Celine, Proust o Flaubert quien, ahora me entero, quería, parece ser, escribir sobre la nada con el único sostén del estilo de la escritura, de su sintaxis y de su prosodia, sin historia o moraleja. Esto es en breve La Grande Bellezza, una película que me podría descolocar, pienso, porque hace ya unas semanas me escriben unos viejos y buenos amigos de LA preguntándome: > Has anyone told you that Toni Servillo in Sorrentino's movie reminds them of you? Ante esta pregunta intencionada no tenía más remedio que satisfacer mi ego e ir a verla en cuanto la estrenaran aquí.

Paseo por la memoria

Paseo por la memoria

[](http://es.wikipedia.org/wiki/Boulder (Colorado))Si lo que quieres es ir desde LA a Andramari en la muga entre Getxo y Berango toma el metro en Gobela hasta Bidezabal y, desde esa estación, camina por el Camino del Angel hasta la Venta y desde ahí continua hasta tu destino a no ser que quieras dar un pequeño rodeo y pasar por el Molino de Aixerota que es lo que hice yo. ¿Y por qué querría yo ir a Andramari? Pues en mi caso porque el sábado pasado leí en El Correo que había una especie de alarde del deporte rural vasco bajo el lema de vivir en euskera con financiación de la Diputación y en honor de un getxotarra que ha dedicado mucho esfuerzo a que no se pierdan las tradiciones simplemente porque...

Lo último de Woody

Lo último de Woody

Unos me habían dicho que Blue Jazmine estaba muy bien y otros, los más, que era un bodrio. Ayer viernes después de un viaje endiablado de Madrid a Bilbao, y arrebatados por el aburrimiento de una carretera con tráfico y niebla, nos lanzamos a los multicines del puerto de Getxo a ver esa película doblada. Creo que el doblaje, por el mero hecho de serlo y no porque sea peor que en otras películas, acaba arruinando una película de por sí fallida.

LXX, Chantal Mouffe y mi toma de posición

LXX, Chantal Mouffe y mi toma de posición

La red española de filosofía anunció dos charlas de Chantal Mouffe en Madrid. No pude acudir a la primera en la UAM pero sí a la segunda en el Centro de Estudios Políticos y Constitucionales el pasado viernes a una hora a la que los «mayores» ya tienen su plan de viernes establecido. Así que me encontré entre jóvenes latinoamericanos, seguramente miembros de un mismo grupo conectado con algún centro de esa región relacionado con la UAM, preparado para escuchar la segunda conferencia de Mouffe-democracia-y-representaci%C3%B3n-el-desaf%C3%ADo-de-los-movimientos-sociales-): «Democracia y representación: el desafío de los movimientos sociales».

Zu zara nagusia

Zu zara nagusia

Sí, eres el más grande,y eso se nota en los momentos cruciales, no en cualquier partidito de liga. Ayer era uno de esos momentos especiales pues el Barcelona era la primera vez que visitaba el nuevo San Mamés (que espero siga siempre sin terminar y con el busto de Pichichi errante) y el Athletic necesitaba sostener lo que Josu Urrutia llama esa «filosofía» propia que no cede ante la presión de los ingresos tal como hubiera querido Llorente y deseaba, además, dar las gracias al txingurri alguien que es de los nuestros. Así que la hinchada se puso seria y apoyó sin remilgos a los nuestros, jóvenes, fuertes y con no demsiado control del pelotón (con la excepción de Muniain).

LXIX, Burbujas científicas

LXIX, Burbujas científicas

Desde hace no menos de un lustro le doy vueltas a una perversión que creo detectar en el trabajo científico y trato de explorar sus causas. La perversión radica en la ausencia del par diversidad/rebeldía que, excluído por razones variadas, impone una monotonía y falta de novedades que no pronostica nada bueno. Las razones o causas de este agotamiento o de esta perversión podrían ser variadas.

DiverXo

DiverXo

La televisión está consiguiendo que la comida, y especialmente la gastronomía, se esté convirtiendo en una de mis principales fobias. Odio el lenguaje que se desarrolla a su alrededor y siempre rebosante de diminutivos correspondientes a ese toque personal y definitivo que el chef proporciona mediante una muy pequeña dosis de un ingrediente poco usual. Los rankings de restaurantes solo se pueden comparar en su monotonía a las crónicas del fútbol envilecido por el dinero.

Lo malo de Bilbao es...

Lo malo de Bilbao es...

Bilbao es mi patria, en ese sentido en el que un amante diría a su amada que ella es su única patria. Es algo que está más allá de nacionalismos y mucho más cercano al reconocimiento en uno mismo de las convenciones de un tiempo y un lugar determinados, pautas de conducta de las que uno no podría librarse ni aunque lo intentara, cosa que no está en mi mente. Y aun así no estoy del todo ciego y me doy cuenta de que son solo mis recuerdos infantiles los que hacen de mí un bilbaíno irredento pase lo que pase.

Y ahora The Economist

Y ahora The Economist

Pearson PLC aprovecha las sinergias y, si hace unos días lo hacía con un editorial del FT, ahora lo repite de forma ampliada en el último The Economist correspondiente al pasado viernes: proponer una nueva forma (nada nueva) de enseñar Economics . Es una columnita un poco más extensa que la del FT y, además, reporta sobre un experimento que está teniendo lugar en el UK ahora mismo. Me ha llamado la atención porque, al extenderse un poco más, lo que predica se corresponde exactamente con el programa con el que comenzó la Carlos III hace 24 años en sus estudios de Economía.

¿Nadar? ¿flotar?

¿Nadar? ¿flotar?

Hace menos de un año, Patsy Ostroy colgó en mi blackberry Brain Pickings, la página de Maria Popova que, de manera regular, ofrece ideas de pensadores conocidos en diversos campos y que, pienso yo, resultan ser de utilidad en algún sentido para una gran variedad de gentes. Hace unos días recibí a través de este canal un trabajo en el que Popova hace referencia a la edición de una colección de cartas entre las que comenta una de Hunter S. Thompson, un icono de aquellos años jóvenes que he evocado al leer a Alan y en los que nos parecía que la escasez no era tan rígida y que podíamos prescindir de ella mientras explorábamos una nueva manera de vivir a partir del existencialismo y de la búsqueda sana del placer.

Un decepcionante editorial del FT

Un decepcionante editorial del FT

Casi siempre lo mejor de un editorial del FT suele estar en el título y su correspondiente subtítulo. En este caso, correspondiente al 13 de noviembre, esta ley no se cumple y mientras el título es prometedor- The new economics- el subtítulo es inusitadamente ramplón: «Teaching of the discipline needs to rely less on abastract models». Si este conjunto de dos frases resulta un poco decepcionante es, primero, porque lo que promete el título se queda en una mera mención del INET (Institute for New Economic thinking) del que ya se ha hablado en este blog en repetidas ocasiones, que se creó por la iniciativa de Soros y que, aunque prometedor, todavía no es del todo rompedor ni de gran poder lumínico y, segundo, porque decir que la enseñanaza de la economía debiera ser menos abstracta y más práctica no es decir nada y parece como un slogan de una Business School.

Un triste día de otoño

Un triste día de otoño

Ha sido un fin de semana largo en Foixà. Nos «saltamos» el viernes y así pudimos cenar con buenos amigos ese mismo viernes y ya el sábado celebrar por todo lo alto el día de Thanks Giving con una semana de adelanto. Es buena esta reunión cada dos años pues ves a amigos de verdad a los que no tienes ocasión de tratar asiduamente por la distancia geográfica.

LXVIII, Un continuo retramar

LXVIII, Un continuo retramar

En el trabajo en curso al que hacía referencia el otro día trato de encontrar la clave para no caer en el cosmopolitismo desiderativo de aquellos que se creen muy viajados y ciudadanos del mundo seguramente arrastrados por la vergüenza que les da que les vean como gente enraizada, de pueblo. Este cosmopolitismo tan apreciado en los curricula de cualquier profesional es, sin embargo, una añagaza del llamado Sistema que nos lleva por un camino que no lleva a ninguna parte en la construcción de nuestra individualidad única. Tal como arguyo en ese documento que no sabría donde publicar, solo una «traición» secuencial a algún rasgo de la [[comunidad imaginada|comunidad identitaria]] del momento que vives te permite llegar a la individuación, a convertirte en una persona auténtica y no una pieza de una máquina desconocida.