2.3 Y termino de describir lo que creo reconozco como el nudo de la narración de Vicente considerando muy brevemente la política, de la que no sé nada vista como ciencia política y que yo solo entiendo como mis pulsiones hacia lo que veo en mi entorno más o menos amplio.
*Vivimos la posible liberación del mundo árabe o, al menos de parte de él, y muy a menudo no estamos seguros de que la jovialidad de los menores de edad por su libertad sea bueno para no se sabe que equilibrios que se me antojan equivalentes a una prisión en la que las paredes no tienen grietas para tranquilidad del espíritu. De ese espíritu (Ereignis) que mediante el baile de los velos que ocultan y revelan al ser conforma la “evidencia de aquello que hay que ocultar y en la que aquello que se evidencia es la voluntad de poder” o lo que es lo mismo la desesperada y alucinada voluntad de encontrar el cierre de lo que no puede sino estar siempre abierto como un globo aerostático que no se eleva sin un agujero por donde penetra el aire caliente.
**Y finalmente la ensimismada “voluntad de voluntad”. Y pensemos aquí en la izquierda abertzale o mejor aun en la última reacción mayoritaria ante la presentación de Sortu, una grieta en un edificio que se creía sellado y que se desea cerrado a cal y canto, con varias capas de ladrillos acarreados y apilados frente a las grietas que han surgido y ante las fisuras que sutilmente se insinúan sin esperanza alguna de solución frente al derrumbe. Cabe aquí citar a otro poeta, Rogers de Pink Floyd, recordándonos que esto no es sino “another brick in the wall” así como volver a Cohen y recordar que las grietas de todo edificio es por donde entra la luz: “that´s how the light gets in”